Perú amaneció con una noticia que movió al mundo, Pedro Pablo Kuczynski, dimitió ante el próximo voto de destitución que le aplicaría el parlamento. Algunos legisladores que previamente apoyaron a Kuczynski, lo llamaron a renunciar después de las acusaciones de que trató de recompensar a los miembros del Congreso a cambio de ayudarlo a mantener el poder.
Sus deserciones condenaron la presidencia del ex financiero de Wall Street y lo convertirían en el primer presidente ejecutivo en caer, como resultado directo del escándalo de Carwash en el continente. En un primer intento de destituir a Kuczynski, de 79 años, en el mes de diciembre, los votos se quedaron cortos debido a las abstenciones y una división entre las diferentes facciones de la oposición.
La decisión de Kuczynski se produjo después de que Jorge del Castillo, un legislador del partido opositor Apra, y tres legisladores que dejaron el partido de Kuczynski el año pasado, dijeron que ahora estaban a favor de la acusación. Su cambio de opinión siguió al lanzamiento de videos filmados en secreto que parecen mostrar a legisladores aliados del gobierno diciéndole a un miembro del mayor partido de oposición peruano, Popular Force, que controlaría las obras públicas en su jurisdicción si se abstiene en la votación del jueves para derrocar al presidente .
Salvador Heresi, legislador del partido Peruanos por el Cambio de Kuczynski, dijo antes de la renuncia que habría votado por la acusación.
«Lo que vimos en los videos publicados ayer es vergonzoso y afecta gravemente a nuestra democracia», dijo a través de Twitter.
El material presentado inclinó la balanza para acusar a Kuczynski, después de varios reclamos donde mintió al Congreso para ocultar sus vínculos con la deshonrada constructora brasileña Odebrecht, que está en el centro de una investigación de soborno en todo el continente conocida como Carwash.
Del Castillo, quien previamente dijo que no había motivos para derrocar a Kuczynski, manifestó en Radio Programas, que el presidente debería renunciar y permitir que el vicepresidente Martín Vizcarra se hiciera cargo.
En declaraciones ofrecidas a periodistas, antes de que los videos fueran emitidos por Popular Force, Kuczynski dijo que las acusaciones de compra de votos eran «una gran mentira».
La jefa de gabinete, Mercedes Araoz, negó que el gobierno haya ofrecido proyectos o dinero para influir en los legisladores, en comentarios a periodistas el miércoles.
Pedro Pablo Kuczynski, agradeció a sus ministros y parlamentarios, así como a sus colaboradores, por el apoyo brindado en lo que duró su gestión. Reafirmó también haber trabajado con “total honestidad” en su vida pública y privada.
Prensa Digital Mippci
