Un transmisor artesanal de 140 vatios, una mesa redonda y un micrófono hicieron posible el inicio de la Radio Cultural Alameda 100.3 FM, un proyecto que nació en la comunidad de San Agustín con el objetivo de darle voz a los habitantes de esa parroquia.
El director de la emisora comunitaria, Javier Madrid, comentó que lanzaron la señal en septiembre de 2010 para el plan comunicacional de las elecciones parlamentarias. “Es una experiencia única. Cuando empezamos todo lo que teníamos era la intención, de todos los productores sólo hay dos que son comunicadores. Todos los demás aprendimos haciendo radio en estos espacios”, dijo.
Del mismo modo, agregó que gracias al apoyo de la Asociación Nacional de Medios Comunitarios, Libres y Alternativos (ANMCLA) pudieron obtener los equipos. “Pasamos un proyecto al Palacio Federal de Gobierno y nos dieron el apoyo. El primer transmisor que encendimos fue artesanal, de 140 vatios, y lo hizo un camarada que se preparó en la Escuela de Formación que tiene ANMCLA. Esa fue la experiencia más bonita”, relató Madrid.
Después de participar en los talleres de adecuación, presentaron un proyecto y en la actualidad tienen un transmisor de 500 vatios y una antena que le proporciona más alcance a la radio.
UN ESPACIO PARA LA CULTURA
El estudio está ubicado en la Casa Cultural Alameda, que se encuentra en la avenida principal de la parroquia San Agustín. Cuenta con tres micrófonos y una cabina para la operadora.
Desde sus inicios la emisora funciona en esos espacios que poco a poco han ido adecuando. La música venezolana y caribeña es parte fundamental de la programación, porque “hay que recordar que esta es una parroquia salsera y la gente ha mantenido sus oídos a nivel musical bastante abiertos. Ponemos música de otros países como Puerto Rico, salsa más que todo”, manifestó Madrid.
Tienen 11 programas que se transmiten de lunes a sábado. Todos se realizan en las tardes, menos El clarín de la comunidad al oído, que sale al aire los miércoles de 9:00 a 11:00 de la mañana.
El fuerte son los temas culturales y políticos porque “nacimos también con la intención de orientar, documentar y transmitir todas las buenas nuevas de este proceso revolucionario impulsado por nuestro Comandante Hugo Chávez”, señaló el director.
VIVIENDO UN SUEÑO
Eduardo López Mao siempre quiso tener un contacto directo con su comunidad. Trabajó en medios audiovisuales detrás de las cámaras y quería estar frente al micrófono. “La Radio Cultural Alameda, a través del colectivo de la Casa Cultural, me dio la oportunidad de hacerlo y estoy muy satisfecho”, comentó el productor de El clarín de la comunidad al oído.
López Mao comenzó a trabajar en la radio en agosto de 2012. En su programa establece contacto con las diversas organizaciones insertadas en la comunidad, lee los periódicos, comenta las noticias del día y repasa episodios del pasado en el espacio “La comunidad de San Agustín caminando a través de la historia”.
Lleva invitados que explican a la comunidad temas relacionados con el transporte, la salud, entre otros. Si por ejemplo hay un problema con las aguas servidas y lo llaman para notificarle, él hace desde su programa un llamado a las instituciones encargadas para que atiendan esa necesidad de los habitantes de la parroquia.
También cuenta con el segmento “Un minuto con la salud comunal”, en el que hace entrevistas, cada quince días, a las muchachas que trabajan en el ambulatorio de salud de San Agustín.
“El objetivo principal de la radio es darle voz a los silenciados, a los que eran invisibles y ahora somos visibles, a través de la comunicación. La satisfacción es que uno tiene el enlace con la comunidad y eso es lo más importante porque la gente escucha el programa y nos llama para darnos sus comentarios”, expresó.
Para el productor los valores que se impulsan con los medios comunitarios son la creación de un nuevo ciudadano, un futuro mejor para las niñas y niños y el rescate de los jóvenes.
“Nosotros, a través de los programas, le hacemos un llamado a los muchachos para que vengan, hagan su programa y se dirijan a su comunidad, porque van a sentir que son escuchados a través de la radio. El valor principal de todo esto es rescatar al ciudadano, darle el valor y visibilizarlo para que sea protagonista de su quehacer social”, enfatizó López Mao.
DE TODOS Y PARA TODOS
“Estoy aquí desde que se inició la radio. Me dieron talleres y después empecé con la práctica. La experiencia con la comunidad es buenísima porque ya todos tienen conocimiento de la radio e intercambiamos experiencias. Ellos vienen a los programas y están súper informados de todo lo que se hace”, acotó Florangel Ortegoza, quien es operadora de la emisora.
Los productores y encargados de la radio aprovechan las reuniones del Consejo Comunal para intercambiar experiencias y hacer la invitación a la comunidad para que lleve sus propuestas a la emisora.
“La invitación está abierta a todos los que quieran participar, simplemente tienen que entregarnos una sinopsis de lo que quieren hacer, escrita a mano, con un buen contenido y que esté comprometida con este proceso revolucionario”, apuntó Madrid.
Asimismo, una de las cosas que les piden a las personas de la comunidad que quieran hacer sus programas y formar parte del equipo es que tengan claro el compromiso que significa usar los micrófonos de la emisora porque “no queremos gente que llegue aquí a dividir o dañar todo lo bello que se ha hecho en este proceso”.
Los trabajadores sienten que cada día adquieren más experiencia y la gente se comunica y les dice lo que deben mejorar. “Uno lo que hace es recoger porque somos voceros de la comunidad. El proyecto es el pueblo y, también, es el pueblo el que lo dirige a uno”, señaló el productor.
Ciudad Caracas
