Más de 25.000 campesinos de todo el país han participado en las Asambleas Agrarias Parroquiales, informó este lunes el ministro para la Agricultura y Tierras, Yván Gil.
“Asambleas Agrarias incorporan ya más de 25.000 campesinos a la elaboración de políticas agrícolas”, escribió a través de su usuario en Twitter @yvangil, y de inmediato añadió: “Contra la guerra económica, más socialismo”.
Las asambleas agrarias parroquiales arrancaron el pasado 18 de septiembre con el objetivo de enfrentar la guerra económica promovida por sectores de la derecha para desestabilizar al Gobierno Nacional, así como impulsar la planificación en materia de políticas públicas en el sector agropecuario, con miras a la mejora de la producción.
Al anunciar estas nuevas instancias, Gil precisó que aspiran a que en las 1.020 parroquias del país se instalen las asambleas, entre el Ejecutivo y los colectivos de productores agrícolas.
Esta iniciativa se integra al Gobierno del poder popular en materia agropecuaria, activado ante las amenazas a la economía del país que dirigen grupos de la derecha.
A través de las asambleas se pretende, de cara al próximo ciclo de verano, “articular todo lo que tiene que ver con el proceso productivo, desde el financiamiento, la entrega de insumos, el arrime de las cosechas, la comercialización y el combate al latifundio. En fin, coordinar las políticas del Estado en las 1.020 parroquias a nivel nacional”, explicó el ministro en aquel momento.
Adicionalmente, serán espacios de participación en alerta máxima “para el combate que estamos librando en la lucha económica, para garantizar la paz económica”.
Esa guerra económica, denunciada reiteradamente por el Ejecutivo Nacional, se ha expresado en fallas de abastecimiento, acaparamiento y especulación.
Ante esto, el Gobierno del presidente Nicolás Maduro creó el Órgano Superior para la Defensa Popular de la Economía.
Gil apuntó en días pasados: “El llamado es a que se incorporen a la lucha para evitar el sabotaje, garantizar que los insumos lleguen a su destino final, que es la tierra para producir; que las cosechas se den en el momento adecuado, evitar que elementos disfrazados de empresas intervengan saboteando y generando especulación a nivel del productor”.
Las asambleas interactuarán con las autoridades y las diversas formas organizativas del pueblo para determinar las fallas y acordar acciones planificadas.
Correo del Orinoco
