Hoy, se cumplen 70 años del asesinato de Jorge Eliécer Gaitán, el más grande líder popular colombiano, conocido como el Tribuno del Pueblo, por abocarse a la defensa de los más desprotegidos.
En 1929, abrió un debate de control en el Congreso, debido al asesinato de un número aún no determinado de trabajadores de la United Fruit Company en la región de Ciénaga, departamento del Magdalena.
Los obreros exigían condiciones laborales dignas y un trato justo por parte de sus empleadores. Este asesinato en masas es conocido como la Masacre de las Bananeras.
Nació en Bogotá, el 23 de enero de 1903. Jurista, escritor y político colombiano, fue alcalde de Bogotá en 1936, ejerció la titularidad en el Ministerio de Educación en 1940 y Trabajo en 1944. Congresista entre 1929 y 1948. Candidato presidencial, disidente del Partido Liberal en las elecciones de 1946, posteriormente ocupa la jefatura única del partido.
Era el candidato del partido para las Elecciones Presidenciales pautadas para 1950, que se desarrollaron en 1949, debido a su asesinato, calificado de magnicidio, que se le atribuyó a la oligarquía colombiana y a una conspiración dirigida desde EEUU para impedir que el socialismo tomara el poder en Colombia.
El día en que fue asesinado, Gaitán salió al mediodía, en compañía de varios amigos desde su sitio de trabajo en el edificio Agustín Nieto, para almorzar en el hotel Continental, a la espera de varias reuniones, entre ellas, con el entonces joven líder estudiantil cubano Fidel Castro y con el político venezolano Rómulo Betancourt.
El asesino, Juan Roa Sierra, lo esperó en la entrada del edificio y le disparó varias veces con un revólver. Gaitán fue trasladado a la Clínica Central, donde murió a las 2:05 de la tarde.
Roa fue linchado por la multitud por la carrera Séptima, amarrado y arrastrado hasta la plaza de Bolívar. Ante la respuesta del Ejército, el pueblo se atrincheró y se armó con herramientas y todo tipo de objetos que saquearon de las ferreterías y estaciones de Policía, donde algunos oficiales entregaron sus armas para salvar sus vidas.
La turba se dirigió al Palacio de La Carrera (actual Casa de Nariño) y al llegar a la plaza, fue asesinado el coronel que los comandaba, poco antes de llegar al Palacio. Cinco tanques de guerra dispararon a la multitud y masacraron a 300 personas.
Dos exagentes de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) reconocieron la participación de la agencia estadounidense en el asesinato de Gaitán, en el libro El Gobierno Invisible, a través de la «Operación Pantomima«.
El asesinato de Gaitán provocó una violenta reacción popular que fue reprimida brutalmente por el Gobierno y se conoce como «El Bogotazo«, que destruyó 142 edificaciones del Centro de Bogotá.
Asimismo, se generaron protestas violentas en otras ciudades cercanas, como Zipaquirá, en los municipios y regiones gaitanistas, y en Barrancabermeja, durante más de un mes.
Finalmente, los enfrentamientos bipartidistas se extenderían a casi todas las regiones de Colombia durante el largo periodo conocido como «La Violencia».
Prensa Digital MippCI
