Hoy, 25 de mayo, se conmemora a los Niños Desaparecidos, iniciativa que comenzó en 1982, en Estados Unidos, tras la desaparición de un niño de 6 años en Nueva York. Desde entonces, se han ido sumando la mayor parte de los países, incluyendo la Unión Europea en 2005.
El Día Mundial de los Niños Desaparecidos recuerda a todos los niños que han sido separados de sus hogares y se solidariza con las familias que han sufrido la terrible pérdida de un niño por causas desconocidas.
Asimismo, los foros internacionales aprovechan este día para reflexionar sobre las causas del contundente flagelo de la desaparición de los niños en todo el mundo, entre ellas, la violencia sexual infantil, la pedofilia, la trata de niños y niñas.
Recordemos que la Revolución Bolivariana, otorgó rango constitucional a la Ley Aprobatoria de la Convención sobre los Derechos del Niño, promulgada en Venezuela en 1990, y la adecuó y actualizó según la Convención sobre los Derechos del Niño y demás tratados internacionales que en esta materia, a la Ley Orgánica de Protección del Niño, Niña y Adolescentes, promulgada en 1999.
En este sentido, el Estado venezolano amplió su marco legal como principio de acción en el esfuerzo de garantizar la protección de los niños, el derecho a la vida, a la salud, la seguridad social, protección en casos de conflictos armados, educación, acceso a la información, preservación de su identidad, nombre y nacionalidad, a no ser separados de sus padres, a la libertad de pensamiento, conciencia y religión, a la recreación y la cultura, a la protección y seguridad, a la participación libre y al desarrollo.
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