Durante su intervención en la 67 Asamblea General de Naciones Unidas, el canciller de Cuba, Bruno Rodríguez, manifestó que las elecciones presidenciales que se celebrarán en Venezuela el próximo domingo «serán decisivas para el destino común de la región».
«Al pueblo venezolano y a su líder, el presidente Chávez, le expresamos toda nuestra solidaridad ante los intentos de desestabilización que se avizoran», agregó el ministros de Exteriores cubano desde Nueva York.
Rodríguez advirtió que «los poderes que gobiernan en los Estados Unidos cometerían un gravísimo error, de consecuencias impredecibles, si alentaran a revertir por la fuerza conquistas sociales de nuestros pueblos».
El canciller hizo un recuento de las últimas citas continentales y destacó con especial interés la constitución de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) en diciembre de 2011 en Caracas.
Recordó las palabras que en ese momento dio el líder de la revolución cubana, Fidel Castro, a propósito del nuevo organismo continental: «ningún otro hecho institucional de nuestro hemisferio durante el último siglo refleja similar trascendencia».
«Sabemos que la Celac aún deberá ser construida en lo hechos (…) pero definitivamente América Latina y el Caribe han cambiado y se proponen a hacer una contribución mayor al equilibrio del mundo», agregó Rodríguez.
Denunció el fracaso de las promesas de 2009 hechas por el mandatario Barack Obama con respecto a la región latinoamericana y señaló el declarado interés tanto de la Casa Blanca como de la Otan en las riquezas de la región, la imposición de «modelos de cultura y pensamiento», así como la injerencia en los asuntos internos de estados soberanos.
«La patria americana de Bolívar, Nuestramérica de Martí, ha entrado en una nueva época en el siglo de su definitiva independencia», sentenció.
