El objetivo primordial de las publicaciones del Centro Nacional de Historia y el Archivo General de la Nación, está dirigido a ofrecer herramientas a las niñas, los niños, adolescentes y público en general, para que “puedan discernir y construir su propia historia”.
El responsable de Proyectos Especiales de Formación en el CNH y AGN, Rongny Sotillo, explicó al Correo del Orinoco que se proponen abrir una perspectiva distinta de la historia, ya que esta disciplina no debe entenderse solo desde los textos escolares sino desde el punto de vista personal.
Como ejemplo, mencionó que en un texto de ficción se puede narrar muy bien la Campaña Admirable de 1813 o cualquier otro hecho histórico: “La niña o el niño, al enfrentarse a un cuento, lo que hace es despertar un interés particular por ese evento, y van a investigar por su cuenta”.
Señaló que con este tipo de aprendizaje la historia deja de ser “un cuento que te echa otra persona” y se convierte en algo propio, “algo mío, que yo manejo, investigo y construyo”. De esta manera, se logra crear un lazo entre lo pasado y lo presente, “saber de dónde venimos para saber hacia dónde vamos”.
Aclaró que estas obras no son textos escolares, ya que de eso encarga el Ministerio del Poder Popular para la Educación. “Creemos que lo está haciendo muy bien”, añadió.
PARA APRENDER JUGANDO
Sotillo se refirió a los libros infantiles de su autoría Cierto día doce y Una aventura llamada libertad, recientemente publicados por el CNH y el AGN. Sobre la primera obra, afirmó que aborda la Batalla de La Victoria. Se trata de un relato infantil, “narramos la aventura de un gigante que se enfrenta a un monstruo de cinco mil pezuñas”, con lo cual se hace una analogía entre el prócer republicano José Félix Rivas y el ejército comandado por José Tomás Boves.
En Una aventura llamada libertad, señaló que “hemos ido más cercano a lo lúdico”, ya que recurre a unas rimas muy cortas para relatar todos los procesos que vivieron Simón Bolívar y el Ejército de Oriente en el año de 1813 para poder llegar a Caracas. “Se unen lo que fue la Campaña Admirable en la zona occidente del país y la Campana de Oriente”, precisó.
En ese sentido, aseguró que la Campaña en la parte oriental del país “siempre ha sido invisibilizada; la mayoría de los venezolanos no saben que José Francisco Bermúdez y 45 soldados, en verdad hombres sacados de las haciendas, marcharon desde el oriente reclutando gente hasta lo que hoy se conoce como Barcelona”.
Detalló que la obra también contiene una interpretación de cada verso y un glosario de términos para explicar, por ejemplo, el por qué figura la bandera de Cartagena de Indias, Colombia, en algunos de los dibujos.
TALLER DE HISTORIETAS
La entrevista discurrió durante la realización de un taller infantil de historietas, el pasado miércoles, en el marco del Tercer Congreso Nacional de Cultura, en la Casa Natal del Libertador. En la actividad participaron 40 niñas y niños de tercero y quinto grado de la Unidad Educativa Víctor Manuel Turmero, de la parroquia Santa Teresa.
Los y los participantes construyeron una historieta utilizando como personajes a los héroes y heroínas de la patria: Manuela Sáenz, Josefa Camejo, el Negro Primero, Guaicaipuro y otros. Como herramientas manejaron las tijeras, la pega y los lápices de color.
Sotillo subrayó que en este caso no se utilizan elementos o personajes de ficción, sino que se realiza una reinterpretación dentro de los parámetros del público infantil de “personajes históricos importantes”. Se trata de trabajar con lo que se denomina “la historia insurgente, aquella que no se contó, que incluye a las clases subordinadas: los negros, las mujeres, los pardos, los indígenas”, explicó.
Aseveró que “estas clases subordinadas nunca han sido abordadas en los textos escolares; todavía no son contadas”. Recordó que la Colección Bicentenaria sí incluye la historia insurgente, pero de momento “no llega a todas las escuelas, es una lucha que estamos dando”.
Sotillo aseveró que el hecho que las niñas y los niños se apropien de estos personajes, al ver por ejemplo, a Guaicaipuro como su héroe, es un valor que se debe saber aprovechar: “Cuando empiezo a jugar con mis indígenas y héroes patrios, como una Juana Ramírez o una Josefa Camejo, estamos acabando con esa discriminación de género”.
Recordó que los textos tradicionales de historia invisibilizó a la mujer, “aquí no hubo costureras, enfermeras o soldadas, sino puro macho echando tiros”.
HABLAN LAS PEQUEÑAS Y LOS PEQUEÑOS
Consultamos la opinión de los protagonistas de la jornada, que cursan el tercer grado. El niño Rainer Pérez, de 8 años, expresó: “Todo está muy bien. Me gusta la actividad, hemos recortado las figuras y quedó bonito. Estamos aprendiendo de Simón Bolívar y los héroes”.
La niña Gabriela Rosales, 7 años, manifestó: “Me gusta porque me enseñan historia y a recortar y pegar las historietas. Me gustó la clase de historia”.
René González, 7 años, opinó: “De todo lo que hicimos lo que más me gusta es recortar y pegar para hacer comiquitas”.
Nohemy Tenorio, 8 años, expresó: “Me gustan las comiquitas y lo que dijo el profesor. También leer y escribir, y los colores. La casa de Simón Bolívar está muy bonita”.
Yuldreily Castro, 8 años opinó: “Me gusto el taller de recortar y pegar los personajes de la historia”.
Correo del Orinoco
