Como un saqueo del capitalismo al pueblo venezolano calificaba el comandante Hugo Chávez la excesiva ganancia de las empresas privadas en la venta de alimentos, así como en electrodomésticos y otros productos, por lo que el Gobierno Bolivariano impulsó una política de subsidio y de precios regulados.
Durante el Aló, Presidente número 357, realizado el 16 de mayo de 2010, en el que fue inaugurado un Súper Mercal en El Tinaco, estado Cojedes, Chávez hizo referencia al precio de la leche que Mercal expendía a 7,89 bolívares, mientras que en “el libre mercado” se vendía a 25 bolívares.
“Tú te das cuenta la diferencia, pero saca la cuenta, comadre”, decía el comandante en conversación con una de las trabajadoras del nuevo mercado de alimentos en el que se venden productos de la cesta básica con hasta 60% de ahorro gracias al subsidio del Ejecutivo.
“Ahora, en el mercado capitalista, no, quién va a subsidiar nada, es el pueblo el que subsidia a los ricos“, remarcaba el líder bolivariano al explicar que en el modelo socialista el país no pierde dinero sino que expende productos a precios justo, partiendo de los verdaderos costos de producción.
“Te lo venden a más, te explotan, te roban y entonces hay consecuencias, el hambre, porque hay mucha gente que no puede comprar eso. No puede, y a ellos no les importa nada, que compre el que pueda comprar. Bueno, ese es el capitalismo, no te olvides“, puntualizaba el comandante en su pedagógica alocución dominical, en la que además habló también de los precios de productos como el café, la carne, el azúcar y el frijol.
“Allá en el mercado venden bajo el manto maldito de un sistema que se llama capitalismo, que lo que busca es ganar plata para unos poquitos y los demás que se mueran de hambre, comadre, que no tengan agua, que no tengan comida, que no tengan energía eléctrica, que no tengan vivienda, que no tengan ni ropa”, agregaba el Jefe de Estado, quien advertía además sobre la perturbación del precio del dólar como mecanismo de especulación y desestabilización del país.
AVN
