Alicia Bárcena, secretaria ejecutiva de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), en una entrevista con la agencia Sputnik Nóvosti, aclaró aspectos sumamente importantes en relación a la situación actual de Venezuela -en el plano económico, social y político o de la gobernabilidad-. Cabe destacar que dicha vocera de la Cepal enfatizó en que nuestro país no atraviesa una crisis humanitaria, sino que trabaja para superar las dificultades políticas y económicas por la que atraviesa.
Cabe reflexionar entonces sobre el término muy posicionado en el último semestre de 2016 por los medios de comunicación locales y foráneos y los voceros de la oposición venezolana para referirse a la cotidianidad venezolana como «crisis humanitaria«.
En este sentido, Fernando Buen Abad analiza este concepto, tan recurrente últimamente, en nuestro espectro comunicacional “es una irresponsabilidad señalar semejante cosa, porque en primer lugar la crisis humanitaria es una situación de verdad grave en la que está en riesgo la vida de una persona, población o grupo ante circunstancias en las que se ha perdido el control (…) Jugar con ese término es en primer lugar irresponsable y en segundo lugar muy tramposo. Es inexplicable en el caso de Venezuela que ha recibido reconocimientos internacionales a propósito de la calidad de vida de los ciudadanos, en materia de salud, educación, alimentación».http://www.correodelorinoco.gob.ve/tema-dia/crisis-humanitaria-una-matriz-montada-para-propiciar-una-intervencion-extranjera-pais/
“El país no está en una crisis humanitaria, definitivamente no, hay que tenerlo claro. Hay escasez de ciertos productos y tensión política, pero Venezuela tiene todavía muchos elementos para ser un país vibrante”, afirmó Bárcena.
Señaló que pese a la caída de los precios del petróleo, Venezuela está cumpliendo con los pagos de sus deudas internacionales, por lo que continúa “recibiendo financiamiento y créditos, quizás a costos altos, pero los sigue recibiendo”.
Además, hizo referencia al esfuerzo que viene realizando el presidente Nicolás Maduro en función de estabilizar los precios del petróleo, en su gira por países miembros y no miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP).
Dada la aclaratoria, cabe preguntarse hasta dónde llegan la ambición desmedida y la falta de identidad nacional, desarraigo o inconsciencia de la oposición venezolana, en su afán de solicitar la aplicación de la Carta Democrática hacia Venezuela, facilitando el escenario para una intervención extranjera y echando al derrotero la soberanía de la patria.
En este contexto de manipulación dirigida y estructurada hacia la subvención de los fines imperiales en suelo patrio, Buen Abad llama a estar atentos «Por tanto utilizar esto como pretexto para una ofensiva política, comunicacional o mediática para desestabilizar es un episodio delictivo sobre el que hay que poner los ojos”.http://www.correodelorinoco.gob.ve/tema-dia/crisis-humanitaria-una-matriz-montada-para-propiciar-una-intervencion-extranjera-pais/
Prensa MippCI
