“Llamo a la oposición a una gran rectificación en sus posturas frente al paramilitarismo, frente a la violencia terrorista, rectificación valiente, lo llamo a que den la cara a tiempo para que en Venezuela no se imponga -desde la derecha- una guerra terrorista contra el pueblo”.
El llamado lo hizo el presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro, luego de analizar profundamente las reacciones de voceros de la oposición venezolana, y militantes de organizaciones políticas de derecha tras el vil asesinato del diputado del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) Robert Serra el pasado 1º de octubre.
Lamentó que una especie de “neofascismo” haya permeado a buena parte del sector opositor, de allí que haya reiterado su pesar, sobre todo para la vida política nacional, por la carencia que tiene la Revolución Bolivariana de una oposición “respetuosa de los procesos políticos que están en marcha en Venezuela desde hace casi dos décadas, verdaderamente respetuosa de los valores de la democracia, es lamentable decirlo y en el marco del dolor del asesinato de Robert Serra tenemos que reflexionar sobre esto”, aseguró desde la Sala José Félix Ribas del Complejo Cultural Teatro Teresa Carreño, donde este domingo se clausuró el III Congreso Nacional de Cultura.
Esperando que su llamado no caiga en saco rotó, la convocatoria a la oposición a deslindarse de la violencia lo hace un hombre que ha demostrado creer en el diálogo y en la coexistencia pacífica de ideas, modelos o proyectos.
Aprovechó también para solicitar a la militancia chavista -la misma que creyeron mermaría con la siembra del Comandante Hugo Chávez, y que por el contrario se ha fortalecido- a tener máxima conciencia, “hago un llamado a la paz”, dijo.
El mandatario dijo haberse dedicado en las últimas horas a analizar con detenimiento las reacciones de importantes sectores de la derecha opositora, muchas de ellas, aseguró, “son profundamente inhumanas”.
Refirió que las reacciones se dividen en tres ideas centrales, la primera: la de la justificación de un horrendo crimen, tesis que sobre todo se expresa en voceros no oficiales, pero que tienen como característica común ser militantes de una organización política de derecha.
Otros, vincularon el hecho con el hampa común y así “lo declararon a medios de Colombia o expresaron a través de sus cuentas oficiales de Twitter”.
Y una tercera idea en torno a la muerte de Robert Serra, era tendiente a la moderación, pero asegurando que la violencia estaba acabando con el país.
“No ha surgido nadie que de manera honorable y digna haya condenado este crimen horroroso”.
Agregó además “hay que reflexionar. No estoy juzgando, pero (opositores) favorecen la acción criminal de amanera directa e indirecta. Un crimen como ese es grave para el presente y futuro político del país”, dijo.
Aseguró que no podía ahondar en detalles por respeto a la investigación, pero adelantó que lo arrojado hasta ahora es delicado. “Llegará su momento en que pueda decirlo todo. Robert Serra fue asesinado por un grupo de sicarios bajo encargo (…) se trató de una operación quirúrgica que no pasó de 20 minutos. Tenemos la prueba del accionar de los autores materiales”, dijo.
Su petición pública a un proceso de reflexión nacional, lo acompañó de una instrucción a la Ministra del Poder Popular para la Comunicación y la Información, Delcy Rodríguez a incrementar la emisión de microcadenas, bajo el formato de NotiPatria, para informar oportunamente a la opinión pública nacional con miras a proteger la paz del pueblo venezolano. . Informaremos a nuestro pueblo sobre los asuntos que son ocultados por los grandes medios de Comunicación.
Por: Marynés Ladera
