Palacio de Miraflores, Caracas.- La relación Irán-Venezuela se ha erigido en la lucha y resistencia por la defensa de la soberanía nacional y autodeterminación de ambos pueblos, fabricando y solidificando un estrecho vínculo de hermandad y cooperación.
Al respecto, el embajador de la República Islámica de Irán ante la República Bolivariana de Venezuela, Hojjatollah Soltani, manifestó su rechazo y condena a “sanciones y bloqueos sobre todo en lo que se trata a las necesidades esenciales del ser humano; medicamentos y alimentos se incluyen a esas necesidades”.
El alto funcionario de la nación persa mencionó la importancia de “formar un bloque y alianza internacional para desafiar las políticas capitalistas en las organizaciones internacionales, en las Naciones Unidas, hacer una lucha jurídica, política, propagandística en todas las áreas internacionales para condenar ese tipo de pensamientos”.
Del mismo modo, Soltani afirmó que “es a través de la producción que puedes vencer las sanciones del enemigo, del imperio”.
En materia de salud, destacó que Irán y Venezuela son unos de los pocos países del mundo que ofrecen atención gratuita a pacientes contagiados por COVID-19, “a pesar que son dos gobiernos bajo sanciones, a pesar que conseguir equipos y medicamentos cuesta para los gobiernos, pero en los dos países, los dos gobiernos firmemente están llevando esta política porque tienen el compromiso con el pueblo”.
Irán al ser un país de considerable experiencia tecnológica, es una nación hermana con la que Venezuela comparte voluntad política.
“Irán puede ser un aliado confiable para Venezuela, para ayudar al lado de los técnicos venezolanos, al lado de la industria venezolana, al lado de los empresarios venezolanos, ayudar a vencer esas sanciones y esa guerra económica” expresó.
Las palabras fueron ofrecidas por el embajador iraní, Hojjatollah Soltani, durante una entrevista exclusiva concedida al equipo de Prensa Presidencial y la cual se presenta integra a continuación:
Venezuela e Irán, dos naciones que enfrentan medidas coercitivas y unilaterales desde occidente, en ese contexto ¿Cómo avanza la cooperación en materia sanitaria?
Irán y Venezuela como dos países soberanos e independientes cada uno tiene décadas de relaciones exteriores con diferentes países, entre Irán y Venezuela hace 70 años tenemos relaciones diplomáticas que siempre han estado basadas en el respeto mutuo y la colaboración, en los últimos 20 años tiene otra etapa, porque aparecieron otros elementos con la llegada del señor presidente –Hugo- Chávez al gobierno aquí en Venezuela; donde se construyó una vía para que las relaciones marcharan con mayor velocidad en diferentes áreas y estas relaciones tienen diferentes aspectos.
Hoy en día la parte sanitaria, medicamentos y farmacéutico son muy importantes sabiendo que nuestros países están bajo el bloqueo injusto e inhumano de Estados Unidos, y nuestros pueblos están sufriendo por esas sanciones, pero tenemos la firme voluntad de colaborar, de vencer esas sanciones a través de las colaboraciones que pueden establecer nuestros países.
La pandemia de coronavirus ha multiplicado las dificultades, en primer lugar para todo el mundo, en segundo lugar para Irán y Venezuela, para el acceso a medicamentos y equipos que necesitamos para confrontar la pandemia. Es interesante saber que Irán y Venezuela son dentro de los pocos países en el mundo que están ofreciendo atención a los pacientes de coronavirus totalmente gratuito a pesar que son dos gobiernos bajo sanciones, a pesar que conseguir equipos y medicamentos cuesta para los gobiernos, pero en los dos países, los dos gobiernos firmemente están llevando esta política porque tienen el compromiso con el pueblo.
En esa área Irán, con la plataforma científica que tiene, ha logrado fabricar y producir equipos que por las sanciones no podía comprar y que nadie le vendía, pero desde hace meses no solo estamos produciendo sino exportando y llevando a otras naciones a precios justos, incluso a Venezuela. El objetivo no es comercializar un producto, es bajar el dolor a una nación, bajar el sufrimiento de una familia y ayudar para tener acceso al medicamento y a lo que necesita el sector salud.
Nosotros, como hemos sufrido bastante en esa área, sabemos el sufrimiento de una nación y en esa área Irán está ayudando con lo que está a nuestro alcance, hemos traído algunas ayudas humanitarias a Venezuela, entre ellos, algunos medicamentos, algunos equipos, tapabocas y también ayudar a facilitar a las empresas farmacéuticas iraníes a traer medicamentos con buena calidad, con un precio justo aquí a Venezuela para ayudar a las familias venezolanas a tener acceso al medicamento, lo bueno es que hoy en día hay suficiente medicamento iraní en el mercado.
En ese contexto de cooperación sanitaria también se ha destacado el tema estratégico en materia científica, vinculado al tema de la pandemia del COVID-19 ¿Cómo avanza esa cooperación en el intercambio de conocimiento y experiencia científico – tecnológica para atacar el virus?
Irán es uno de los primeros países que utilizó la tecnología de plasma de sangre de pacientes recuperados de coronavirus para poder aplicar a otros pacientes, en esa área las autoridades sanitarias de Irán y Venezuela han tenido varias videoconferencias donde la parte iraní técnicamente explicaba su experiencia, su capacidad, ese nuevo método para el tratamiento de los pacientes.
En el mundo de casi 195 países que existen, son menos de 5 los que lograron fabricar una vacuna contra el coronavirus; el primero como todo el mundo ya sabe, Rusia, se habla de Pfizer de Estados Unidos, los amigos chinos tienen otros proyectos, Alemania tiene otro proyecto, Irán también tiene su propio proyecto y como todo el mundo sabe empezó la fase de pruebas en humanos, que se hizo muy exitoso.
Para demostrar la seguridad y credibilidad de esa vacuna, la primera que recibió esa vacuna es la hija del director de ese proyecto, para transmitir tranquilidad y confianza sobre la vacuna, que según los cálculos, en 45 días llegarían a la fase de la producción masiva, mensualmente –si no me equivoco- 1 millón 500 mil dosis; es otro logro que Irán ha tenido a pesar que estamos bajo sanciones, a pesar que no nos venden tecnologías ni equipos, dentro de 195 países, solo 5 países tiene vacunas de coronavirus, e Irán se ubica entre esos 5.
¿Cómo se perfila la cooperación Irán – Venezuela en ese contexto de desarrollo de su propia vacuna, estaría dispuesto a cooperar con Venezuela en el envío de vacunas?
Por supuesto, con Venezuela no tenemos límites. Irán ofreció becas y cursos de entrenamiento a científicos venezolanos que se vayan a Irán, que conjuntamente con los científicos iraníes tengan proyectos en diferentes áreas y por supuesto –también- el sector salud. Irán está dispuesto a colaborar y compartir su tecnología y su experiencia con Venezuela, que es un país aliado y hermano.
¿Cuál es su apreciación cuando naciones de Europa y occidente también emprendieron esa carrera por buscar una vacuna contra el nuevo coronavirus, pero se plantea la mercantilización por encima de la vida?
Lamentablemente ves que la industria farmacéutica internacional considera el medicamento como un objeto de comercio, que quiere ganar dinero a través de él, eso viene del pensamiento del capitalismo que todo lo calcula a través del dinero, pero en muchos otros países del mundo como Irán, Venezuela, Rusia, China, Cuba, el sentimiento es en base del humanismo, en base a la solidaridad.
En ese contexto del pensamiento humano, el medicamento no es un objeto de comercio, es un objeto de solidaridad, de ayudar, de bajar el dolor y el sufrimiento de una familia, de una persona, de un país.
Cuando compararas esas diferencias, ves que los medicamentos de esas transnacionales se venden con un precio altísimo, no sé, 200 dólares, 70 dólares o 50 dólares, son precios en verdad exagerados, mientras que pensamientos de solidaridad, como Irán, ves que el medicamento es súper barato y con la misma calidad.
La diferencia es que el medicamento iraní, el proveedor iraní, el exportador iraní, con un margen de ganancia lógico está satisfecho. Lamentablemente el pensamiento de capitalismo pone sanciones en países para dificultar la compra de medicamentos para venderlos más caros.
¿Qué opina y cuál es su apreciación sobre el bloqueo económico y las medidas coercitivas y unilaterales?
Nosotros rechazamos y condenamos sanciones y bloqueos, sobre todo en lo que se trata a las necesidades esenciales del ser humano, medicamentos y alimentos se incluyen a esas necesidades. El acceso a un medicamento es un acceso a dar vida a un paciente, a un enfermo, el derecho de vivir es un derecho fundamental en la carta de la Organización de Naciones Unidas, es uno de los fundamentales derechos humanos que tiene todo el mundo. Esos países que, a través de las sanciones y bloqueos están dificultando la vida para otras naciones, están obligados a respetar.
Si por diferentes excusas –reitero- ¡excusas! porque lo que ellos plantean para bloquear y sancionar no son más que excusas; ellos a través de excusas y pretextos generan sancionan a países, le quitan ese derecho a la vida que tiene una nación.
Te sancionan un medicamento pero al final puedes comprarlo a un precio doble o triplemente más caro. El pensamiento es capitalismo, ellos quieren ganar dinero incluso a través de la vida de los seres humanos.
¿Cuál es la estrategia o cuál debe ser la respuesta para contrarrestar estas agresiones?
Yo creo que países como Irán y Venezuela en dos áreas podemos darles repuestas a ellos, primero formar un bloque y alianza internacional para desafiar esas políticas capitalistas que ellos tienen, en las organizaciones internacionales, en las Naciones Unidas, hacer una lucha jurídica, política, propagandística en todas las áreas internacionales para condenar ese tipo de pensamientos.
La otra solución es la experiencia exitosa de Irán, aumentar la capacidad nacional, la autoproducción de los países.
Hablando en cifras, a principio de la Revolución Islámica iraní, la independencia de la industria farmacéutica era menos de 25 por ciento, quiere decir que más de 75 por ciento de los medicamentos eran importados, por los años de guerras, sanciones y sufrimientos para comprar medicamentos; aprendimos que la mejor solución es producir lo que necesitas.
Hoy en día Irán produce el 97 por ciento de los medicamentos que necesita, solo importamos el 3 por ciento, son 2 tipos de medicamentos, uno que el consumo es tan bajo que no justifica económicamente instalar una fábrica de producción de ese medicamento y es mejor comprar, y otros son los recién producidos en el mundo con nuevas tecnologías contra el cáncer que Irán todavía no tiene la producción, pero tenemos el plan especial de incluso fabricar esos medicamentos en Irán.
A través de la producción tú puedes vencer las sanciones del enemigo, del imperio. En el transcurso de las conversaciones nucleares entre Irán y el Grupo 5+1, me refiero a alrededor de 8 ó 9 años atrás, Irán necesitaba importar algún tipo de medicamento para 800 mil pacientes iraníes, que el origen viene de energía nuclear -con fines pacíficos por supuesto en el área del sector salud- y no nos vendían ese medicamento, para presionarnos en las conversaciones nucleares, mientras que 800 mil pacientes iraníes estaban sufriendo por falta del medicamento. Irán declaró: Si no nos venden el medicamento, lo voy a producir.
Ellos pensaban que Irán nunca podría lograr la producción, porque la tecnología es bastante avanzada. Los jóvenes y científicos iraníes en menos de seis meses lograron la tecnología, produjeron y ofrecieron el medicamento al paciente iraní.
Cuando los países occidentales vieron que Irán logró y dominó esa tecnología quisieron detener la producción y cerrar los laboratorios que se instalaron y –propusieron- vendernos –nuevamente- el medicamento, pero como Irán tuvo esa mala experiencia y no confiaba en ellos, no aceptó la propuesta. ¿Qué hicieron? sacaron una resolución en el Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas para condenar a Irán por producir medicamentos, ese es el pensamiento de ellos y la solución es, como dije, la producción.
En la pandemia del coronavirus algunos medicamentos no nos lo vendían, algunos equipos que se necesitaban para el tratamiento como el Kits PCR no nos los vendían, nosotros, las empresas iraníes, en base a esa plataforma tecnológica que tenemos, fuimos a producir los kits, y desde hace 5 meses no solo somos autosuficientes internamente sino que también hemos exportado y buena parte ha venido aquí a Venezuela.
¿Qué otras alianzas están planteadas hacia el futuro?
Alianzas científicas están en nuestra agenda ahora en el sector salud, como hay una necesidad urgente en el país vienen los medicamentos iraníes, pero simultáneamente estamos conversando y estableciendo contacto entre las farmacéuticas iraníes con sus contrapartes venezolanas para producir medicamentos aquí en Venezuela, para hacer la trasferencia tecnológica hacia Venezuela.
Simultáneamente, en el sector educativo estamos trabajando y hemos dado algunas becas para que jóvenes –venezolanos- vayan a estudiar a Irán en algunas áreas, sobre todo la tecnología avanzada que Irán tiene.
Todo el mundo sabe que entre Irán y Venezuela hay una alianza política y que los dos países estamos firmemente uno al lado del otro.
Venezuela fue testigo de la llegada de las embarcaciones iraníes a nuestro país. Por las mismas sanciones, medidas coercitivas y unilaterales contra la estatal industria petrolera venezolana ha sido estratégica la alianza energética –con Irán- ¿cuál es su apreciación sobre esta cooperación?
Irán y Venezuela como dos países fundadores de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), como dos grandes potencias energéticas en el mundo, Venezuela como primera reserva mundial –de crudo-, Irán también entre los primeros cinco países del mundo que tienen las mayores reservas, con una gran plataforma industrial que en los dos países existen, por supuesto que en el sector energético -Caracas y Teherán- también pueden cooperar fácilmente.
Hablando de los ejemplos, porque nos muestran el camino, recuerdo que unos años atrás, me refiero 2007-2008, Irán importaba anualmente casi 5 mil millones de dólares en gasolina, Venezuela exportaba gasolina, incluso en aquel tiempo por orden del señor presidente –Hugo- Chávez se envió gasolina de Venezuela a Irán, porque en aquel tiempo el presidente de Estados Unidos nos había amenazado que iba a sancionar la importación de gasolina.
El gobierno de Irán decidió instalar nuevas refinerías para llegar a la capacidad de autoproducción nacional, bajo las más crueles sanciones del mundo que existían sobre nosotros, Irán instaló su nueva refinería de 400 mil barriles al día. En la instalación de esa refinería llegamos a casi el 75 por ciento de autonomía, de independencia tecnológica en la fabricación de los repuestos, materiales y equipos que necesitábamos, me refiero a casi 3 años atrás.
Ahora, el director del proyecto dijo –hace unos meses- esta vez sí vamos a instalar la refinería con el 100 por ciento de los equipos y materiales que necesitamos, vamos a tener la fabricación nacional, eso quiere decir que con resistencia podemos vencer esas amenazas de los gringos que era sancionar la gasolina y también hacer esa referencia como Venezuela hoy en día sufre de esas sanciones injustas e inhumanas que Estados Unidos impone. Esa guerra económica que están presionando sobre Venezuela, que ha afectado la industria petrolera de Venezuela.
Irán con esa gran experiencia tecnológica que tiene y también con esa voluntad política que existe entre los dos países puede ser un aliado confiable para Venezuela, para ayudar al lado de los técnicos venezolanos, al lado de la industria venezolana, al lado de los empresarios venezolanos, ayudar a vencer esas sanciones y esa guerra económica que hay sobre Venezuela.
En el campo diplomático hemos visto declaraciones en las que Irán ha recalcado la necesidad de seguir defendiendo la carta y principios de la Organización de las Naciones Unidas, ¿Qué tiene de relevancia este planteamiento, en medio de este panorama global de constantes agresiones?
En el escenario internacional a veces, lamentablemente, algunos países súper potentes; sobre todo me refiero a Estados Unidos, aprovechan su presencia en las organizaciones internacionales para presionar a los países independientes. Lo que Irán, Venezuela, Rusia, China, Cuba, Nicaragua, Bolivia, y muchos otros países están pidiendo es respeto a la carta de Naciones Unidas, donde dice que las sanciones están condenadas, amenazar a un país con intervención militar está condenado, no está permitido, y muchísimos otros elementos que lamentablemente hoy en día ves a Estados Unidos como el primer violador a las normas y derechos fundamentales, está demostrando una violación enorme, incluso a la carta de Naciones Unidas.
El respeto a las normas, convenios internacionales, la seguridad y la paz, debe existir para todo el mundo. Esa es la lucha, establecer la justicia e igualdad entre los países, entre la soberanía de los países.
¿Cómo avanzan las relaciones entre Venezuela e Irán y cómo se vislumbra la cooperación de cara al 2021 en un escenario post pandemia?
Con lo que hemos empezado en los recientes meses, en los recientes años nos parece que el 2021 puede ser mucho mejor para las relaciones Irán – Venezuela, en 2020 hemos establecido unas plataformas, por ejemplo el supermercado Megasis que es un proyecto súper interesante para los dos países, donde se ofrece acceso a alimentos que Venezuela necesita. Si en 2020 instalamos el mercado, en 2021 tenemos el plan de desarrollarlo.
En el sector de minería, también algunas empresas iraníes en 2020 han conversado para en 2021 llegar a la ejecución de proyectos. Saliendo un poco de la pandemia, esperamos que se normalice un poco la situación mundial en el intercambio de las relaciones y con la fe en Dios y la ayuda de los empresarios que nos apoyan, esta relación bilateral tendrá un resultado mucho mejor en 2021.
El Ejecutivo Nacional, el presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro, ha dicho que la alianza y cooperación con Irán va más allá de lo comercial y además ha ratificado una hermandad y una amistad.
La relación entre Irán y Venezuela, que fundó el presidente –Hugo- Chávez en 1999, es en base de esa hermandad, a esa fraternidad y después de ese sentimiento, de esa solidaridad y cooperación vienen los proyectos. Por eso es que los dos países hemos estado el uno al lado del otro en los momentos difíciles, cuando hemos necesitado ayuda mutua.
En 2007 Estados Unidos nos amenazaba con sancionar el combustible y el presidente Chávez envió gasolina a Irán, en 2019 cuando Venezuela necesitó apoyo internacional los iraníes se aparecieron aquí con el envío de los tanqueros, eso es lo importante que existe en nuestras relaciones bilaterales.
Prensa Presidencial
