Bolivarianismo, principio político-social de la era Chávez heredada a Maduro

Foto: Archivo Mippci

Palacio de Miraflores, Caracas-. El huracán Bolivariano llegó en el año 99 a Venezuela para dignificar a un pueblo mancillado por décadas, y se instaló en cada palmo del territorio nacional para brindar seguridad y felicidad a sus ciudadanos ¡hasta la victoria siempre!.

El estrecho vínculo entre la filosofía de Simón Bolívar, de ser libres con dignidad, la acción humanista y solidaria en asuntos nacionales e internacionales por los que dio la vida Hugo Chávez, y la continuidad de un legado basado en estas dos vertientes encabezado por el hoy presidente, Nicolás Maduro, muestra cómo es posible hacer de Venezuela y la región suramericana un continente integrado en defensa de su seguridad, paz e igualdad.

La verdadera finalidad que persigue todo gobernante enmarca un rumbo nacional y permite entrever los intereses continentales, como ha sido el caso de estos líderes propulsores de las ideas de Bolívar.

Ideario Bolivariano

Teoría que se puntualiza en igualdad social, independencia política, justicia económica, unidad americana, conciencia histórica y moral ejemplar, propósitos del pensamiento y línea de acción del padre de la Patria, Simón Bolívar.

Foto: Archivo Mippci

Propuso instituir la democracia como sistema de gobierno –cuya autoridad reside en el pueblo-, la división del poder público y la integración americana en miras de constituir enlaces comerciales entre Europa, América y Asia.

La disposición organizativa del Estado debía estar encuadrada a una sociedad humana establecida en un territorio delimitado con actividades específicas, de modo que éste debía estar formado por una población; una realidad físico geográfica, un orden jurídico regido por leyes; la soberanía que abarca la independencia y autodeterminación, y un gobierno compuesto por autoridades frente a las instituciones.

La firmeza de este hombre -Bolívar- está en la memoria y libros que reseñan datos de aquella época de batallas, por hacer Patria y eliminar colonias, lo que lo tituló como el Libertador de América.

Proeza que se convirtió en las bases de la Revolución Bolivariana, que logró atraer y sumar el objetivo de construir Patria justa e igualitaria a mestizos, indígenas, llaneros y afrodescendientes quienes hicieron de toda esta lucha una Gran Revolución.

Chávez alma de la Revolución Bolivariana del siglo XXI

Tras dirigirse en tan sólo un minuto en cadena nacional al país con el icónico “Por Ahora” asumió la responsabilidad de la insurrección militar del 4 de febrero de 1992, que trajo el despertar popular contra las políticas neoliberales, acción que convirtió al Teniente Coronel Chávez Frías en un héroe nacional.

Luego de dos años encarcelado y ser liberado el 26 de marzo de 1994, retomó la lucha por la segunda independencia de la República con el Movimiento Bolivariano Revolucionario 200, “Estamos aquí porque seguiremos luchando por la dignidad del pueblo venezolano”, dijo en una de sus intervenciones de aquellos días.

Foto: Archivo Prensa Presidencial

“¡Adelante va la Revolución social, económica, política y moral en Venezuela!”, sostenía el hombre que encarnó la esperanza de millones de venezolanos.

Con la llegada de la Revolución a Venezuela, dirigida por Chávez, el Bolivarianismo encabezó –luego de casi 200 años- el modelo de gestión propuesto a lo largo de su primera campaña presidencial y que fue respaldado por los venezolanos con más del 56 por ciento de los votos escrutados.

“Una ideología que tiene que hacerse concreta y ser llevada a texto, porque no haríamos nada con estar declarándonos bolivarianos, robinsonianos y zamoranos durante siglos, si no somos capaces ahora, cuando la historia y el momento lo reclama, de sembrar una carta fundamental, en la nueva Carta Magna de Venezuela, en el texto político que va a regir los próximos siglos, la idea bolivariana, esa que viene desde los siglos perdidos”.

Fueron las palabras de Chávez al participar en la primera sesión de la “Soberanísima” Asamblea Nacional Constituyente en el Palacio Federal Legislativo, el 5 de agosto de 1999.

Proyecto que sirvió para sacar a Venezuela del aislamiento en el que se hallaba por ser conocida únicamente por su petróleo, un atraso nacional que sería resuelto a través de un cambio en su ordenamiento jurídico y una profunda educación ético bolivariana.

Con el ideal bolivariano como cimiento de esta nueva Carta Magna, Venezuela seria refundada, la democracia y la soberanía estarían en primer lugar en la transición jurídica a la que estaría siendo reformada la constitución que llevó –desde el 15 de diciembre de 1999- por nombre Constitución de la República Bolivariana de Venezuela.

Texto que consagra los principales derechos humanos, como el acceso a una vivienda digna, a la salud, la educación gratuita y calidad, al deporte y recreación.

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Son estos los primeros pasos socio-políticos puestos en marcha por el comandante y líder de la Revolución Bolivariana, gestión que dio resultados prósperos para el país, a través de Misiones y Grandes Misiones sociales, en las que miles de ciudadanos recibieron atención oportuna en los distintos ámbitos de la vida.

Algunas de las misiones creadas por el comandante supremo, Hugo Chávez, fueron:

  • Gran Misión AgroVenezuela: para aumentar la producción alimentaria a través de la entrega de insumos a pequeños y medianos productores que cosechan.
  • Gran Misión en Amor Mayor: como reconocimiento al adulto mayor que trabajó a lo largo de su vida sin cotizar en el Seguro Social.
  • Gran Misión Vivienda Venezuela: plan de construcción de vivienda para acabar con el déficit de viviendas en la población venezolana.
  • Misiones Robinson I y II; Ribas y Sucre: programa social de alfabetización y de educación básica y diversificada del programa educativo nacional que sirve para las personas que no tuvieron acceso a la educación.

Nicolás Maduro, primogénito del chavismo bolivariano

Por una situación sobrevenida, desgarradora e inesperada para muchos venezolanos, el precursor del Bolivarianismo en América Latina y El Caribe, Hugo Rafael Chávez Frías, dio un paso a la inmortalidad producto de la enfermedad que le fue diagnosticada en junio de 2011.

Ante esta coyuntura el Presidente en ejercicio y en pleno uso de sus facultades, luego de haber obtenido la victoria del 7 de octubre en el año 2012 para comenzar su cuarto mandato como jefe de Estado y de Gobierno de la República, ofreció un sentido discurso el 8 de diciembre de 2012 en cadena nacional de radio y televisión desde el Despacho Uno de Miraflores.

Foto: Archivo Prensa Presidencial

“Si como dice la Constitución, cómo es que dice, si se presentara alguna circunstancia sobrevenida, (…) para asumir el nuevo período para el cual fui electo por ustedes, por la gran mayoría de ustedes, si algo ocurriera, repito, que me inhabilitara de alguna manera, Nicolás Maduro no sólo en esa situación debe concluir, como manda la Constitución, el período; sino que mi opinión firme, plena como la luna llena, irrevocable, absoluta, total, es que —en ese escenario que obligaría a convocar como manda la Constitución de nuevo a elecciones presidenciales— ustedes elijan a Nicolás Maduro como presidente de la República Bolivariana de Venezuela. Yo se los pido desde mi corazón”, comunicó ese sábado, cuando pasaba las 9 y 30 minutos de la noche.

Circunstancia que se convirtió en punto de partida para que el hoy presidente constitucional y por voluntad del pueblo, Nicolás Maduro Moros, asumiera las riendas de una nación que despertó gracias a las lecciones y a la doctrina bolivariana que rescató Chávez para hacer de Venezuela un país libre, soberano e independiente, con políticas humanistas y de inclusión.

Las elecciones presidenciales se llevaron a cabo el 14 de abril de 2013, tras cumplir los lapsos y procedimientos establecidos en nuestra Carta Magna; y su primer mandato comenzó el 19 de abril del mismo año.

Periodo presidencial en el que desde sus inicios fue atacado por la oligarquía venezolana en un acto de desesperación por quebrantar la moral de un pueblo, la determinación a vivir en democracia, a ser emancipado.

Foto: Archivo Prensa Presidencial

En este sentido, el Dignatario venezolano ha estado al frente de cada batalla en la que han intentado desestabilizar en sus diversas fases a la República, no obstante, continúa trabajando día a día –a pesar de los embates producidos por una guerra de cuarta generación- por construir Patria.

Los valores, la convicción, el compromiso e ideales de un hombre que vivió en carne propia las agresiones de una época en la que el país estuvo sumergido en la pobreza, militante activo en partidos de izquierda en rechazo al neoliberalismo,  son algunas características del conductor de victorias, del presidente pueblo, Nicolás.

Ideales que comulgan con el sueño bolivariano, ese del que tanto habló el comandante Chávez, pensamiento que es acompañado por países del continente suramericano, quienes apoyan y luchan por el respeto, la autodeterminación y por alcanzar la tan anhelada unión americana que idealizó Simón Bolívar.

Prensa Presidencial/Andrelys Carrasquel

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