Los secretos mal guardados de Leopoldo López

 

La Fiscalía venezolana convocó al dirigente opositor Leopoldo López, de la organización derechista Voluntad Popular, a comparecer por presunto desvío de fondos relacionados con la Asociacion Civil Primero Justicia en el año 1998.

Esa cita está relacionada con irregularidades en dos donaciones efectuadas por la estatal Petroleos de Venezuela S. A., (Pdvsa) a ese movimiento, que se convirtió mas tarde en el partido opositor Primero Justicia.

El Ministerio Público señaló que deberá comparecer además Antonietta Mendoza de López, madre de López.

Durante su gestión como gerente de Asuntos Públicos de la División Servicios de Pdvsa, Petróleo y Gas S. A., Antonietta Mendoza emitió un cheque en diciembre de 1998 como “donación” por Bs 60.070.000,00 de la empresa petrolera a favor de la Asociación Civil.

De esa forma, los recursos del Estado fueron utilizados para acciones de carácter político.

La Fiscalía recordó que ambas personas deberán acudir a sus citaciones acompañadas de sus respectivos representantes legales. Leopoldo López deberá presentarse el 28 de febrero del año en curso en el despacho del fiscal Nacional 50, mientras que su madre lo hará 7 de marzo.

Sin embargo, esta no es la primera vez que el dirigente de derecha ha sido señalado por estar presuntamente involucrado en hechos de corrupción.

Con el siguiente trabajo, publicado por el equipo de Patria Grande, en marzo de 2001, vale la pena recordar la hoja de vida política de este personaje:

Parecería una operación de marketing bien montada: anuncios en Noticias 24, apariciones frecuentes en Globovisión y otros canales privados para presentarse como víctima, el eco de CNN para anunciar con bombo y platillo la sesión de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, a celebrarse hoy y mañana en Costa Rica, campañas en twitter, facebook, y cuanta red social pueda estar disponible a sus propósitos…

Leopoldo López es, obviamente, un político bien asesorado. Ha gastado horas en los medios confirmando su presunta condición de víctima. “Hemos visto un aniquilamiento político de lo que el gobierno considera no adversarios, sino enemigos políticos”- ha dicho recientemente. “En el 2008 fueron inhabilitadas un total de 276 personas”- añade, sin aclarar que muchos de esos casos se corresponden con políticos afectos al Partido de gobierno, o a las fuerzas aliadas del Presidente Chávez.

Para los venezolanos, Leopoldo López no tiene secretos. Es vóx populi su complicidad con el golpe de Estado del 11 de abril, sus cargos de tráfico de influencias mientras se desempeñaba como alcalde de Chacao, las millonarias sumas de dinero entregadas por su madre a Primero Justicia, a fin de subvencionar desde PDVSA lo que a todas luces se convertiría en un partido político.

Se conoce también su formación ideológica dentro de la Secta Tradición, Familia y Propiedad, la misma que históricamente se ha vinculado al fundamentalismo católico del OPUS DEI y a la que pertenecen personajes célebres, por su condición terrorista, como Alejandro Peña Esclusa.

Eso, para los venezolanos. Para el resto del mundo parecería que este joven proyanqui, que se dice descendiente de Simón Bolívar, es una víctima más del rrrrégimen de Chávez.

Pero, ¿por qué una persona que mueve tan poderosamente los hilos mediáticos internacionales, mantiene en silencio sus antecedentes turbulentos? ¿Qué esconde Leopoldo López para la opinión pública que se genera más allá de las fronteras de Venezuela? Vayamos por partes:

  • En Venezuela, todo funcionario encontrado culpable de corrupción, puede ser sancionado a través del código penal, civil o administrativo. Este tipo de medida es una facultad inherente al Contralor General de la República y tiene su base constitucional en el artículo 289 de la Constitución.
  • Aunque se ha dicho que las sanciones contra Leopoldo intentaron concretarse en 2008, cuando intentaba postularse como candidato, en realidad los procedimientos aplicados contra él datan de 2004, y fueron publicados en la Gaceta Oficial número 38.455 y número 5.817
  • El 23 de diciembre de 1998, PDVSA asignó 60 millones 600 mil bolívares en calidad de donación a la entonces asociación civil Primero Justicia. La funcionaria encargada de dichas asignaciones fue nada menos que Antonieta Mendoza de López, madre del ex Alcalde López, quien a su vez fungía entonces como directivo de Primero Justicia. Este caso fue documentado por la Contraloría General de la República entre 1998 y 2001.
  • La Sala de Sentencia comprobó que tanto durante la fase investigativa, como en el procedimiento de determinación de responsabilidades, los acusados hicieron uso de su derecho a la defensa. La sentencia concluyó que “existen suficientes elementos para probar un concierto entre los concurrentes”, teniendo en cuenta el parentesco de los acusados y su evidente intención de “dejar en familia” el dinero de PDVSA.
  • La Fiscalía determinó, al mismo tiempo, que durante el año fiscal 2002, mientras Leopoldo se desempeñaba como alcalde del municipio Chacao, traspasó arbitrariamente dineros presupuestados y asignados a determinadas áreas para cubrir gastos de otra índole, vulnerando los procedimientos y leyes que regulan el ejercicio fiscal y presupuestario.
  • El Contralor General de la República impuso en ambos casos responsabilidad administrativa y una multa. Asimismo, aplicó una inhabilitación para el ejercicio de funciones públicas que, en el caso de un Alcalde, puede tener duración de 6 años y estaría vigente hasta el próximo año.

Claro que ninguna de esas evidencias aparecerán en la cobertura de CNN sobre lo que acontezca en la CIDH. Para los shows mediáticos de la derecha, el pasado de Leopoldo López debiera permanecer como una suerte de secreto. Aunque, teniendo en cuenta el documentado expediente que acumula López frente a la justicia venezolana, y las abundantes pruebas contenidas en él, serán, inevitablemente, secretos muy mal guardados.

(Por VDV/Fuente: Patria Grande)

 

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