En pro de crear un sistema agrícola productivo para el autoabastecimiento alimenticio autoridades del Instituto Venezolano de Investigaciones Científicas (IVIC), a través del programa “Manos a la Siembra”, recuperaron una hectárea de terreno, en lo que antes era una laguna para el cultivo de diversos rubros de consumo interno.
El jefe del Laboratorio de Ecología de Suelos, Ambiente y Agricultura del Ivic, Saúl Flores, explicó que se están cosechando legumbres y vegetales, los cuales serán utilizados para complementar la alimentación diaria de los más de 200 estudiantes y docentes que hacen vida en la Unidad Educativa Nacional (U.E.N.) “Rómulo Gallegos”, con sede en el Ivic.
Estiman que para finales del 2018 se recolecte la primera cosecha de maíz y ají dulce. Posteriormente, continuarán con la siembra de cebollín, tomate de árbol, vainitas y otros rubros.
Primera floración de café en el Ivic
Flores acotó que, como parte del proyecto de rescate de las áreas cafetaleras del Ivic y los Altos Mirandinos, ya tienen la primera floración de café que se cultivó dentro del instituto. Además, explicó que dicha producción será usada como semillas, a fin de proporcionárselas a los agricultores locales y estos puedan aumentar la producción en la subregión.
Estiman que para el 2019, en el próximo ciclo del café, se obtenga una cosecha más próspera, donde la meta es la producción de 12 quintales de semillas por hectárea, un quintal representa 45 kilogramos y a la fecha tienen un aproximado de 4 hectáreas sembradas de café.
En el proyecto de rescate de las áreas cafetaleras de los Altos Mirandinos también participan representantes de la Gobernación del Estado Bolivariano de Miranda, el Instituto Nacional de Investigaciones Agrícolas, el Ministerio del Poder Popular para la Agricultura y Tierras y más de 200 productores independientes de la zona.
Generando productos para la agricultura urbana
Desde el Laboratorio de Ecología de Suelos, Ambiente y Agricultura del Ivic se están generando productos experimentales, a base de desechos orgánicos y agroindustriales, con potenciales aplicaciones para la siembra y recuperación de tierras.
El jefe del referido laboratorio señaló que han realizado ensayos exitosos con las conchas de naranjas y las tusas de maíz, logrando sustituir el medio para cultivar hongos Trichoderma spp, especie que es empleada en la agricultura.
Asimismo, agregó que con los desechos de la penca de la sábila han creado un bioestimulante que se puede utilizar como recuperador de áreas impactadas por los hidrocarburos.
“En estos momentos existe un gran interés por un grupo de empresarios que procesan la sábila en la península de Paraguaná (estado Sucre) para poder concretar y utilizar este material de bagazo de la sábila con otra serie de aplicaciones de tipo industrial”, acotó Flores.
Por último, puntualizó que entre otros trabajos, están efectuando estudios con el almidón de la yuca, cápsulas de moringa y conchas de mango descompuestos, como fuente rica en glucosa que puede llegar a sustituir la comercial.
Prensa Digital MippCI/Prensa IVIC
